El pasado fin de año pudimos disfrutar de una días de esquí en la estación francesa de Saint François Longchamp. Posiblemente no sea muy conocida por estas lares, aunque junto con su vecina Valmorel forma un nada despreciable dominio de 165 kms. de pistas, conocido como "Grand Domaine".
Con pistas para todos los niveles, Saint François Longchamp es ante todo una estación de tipo familiar. Sus remontes quizás no sean los más modernos de todos los Alpes, pero se trata de una estación tranquila y con buena nieve.
Estéticamente se trata de una estación agradable que por fortuna no sufrió las atrocidades de los años 60 y 70. No hay mucho ambiente para gente joven, aunque sí un par de pubs, y varios restaurantes.
En verano, sus laderas se llenan de gente para recibir a los aficionados al ciclismo, dado que aquí se encuentra el mítico Col de La Madeleine.
Con pistas para todos los niveles, Saint François Longchamp es ante todo una estación de tipo familiar. Sus remontes quizás no sean los más modernos de todos los Alpes, pero se trata de una estación tranquila y con buena nieve.
Estéticamente se trata de una estación agradable que por fortuna no sufrió las atrocidades de los años 60 y 70. No hay mucho ambiente para gente joven, aunque sí un par de pubs, y varios restaurantes.
En verano, sus laderas se llenan de gente para recibir a los aficionados al ciclismo, dado que aquí se encuentra el mítico Col de La Madeleine.
